Respuesta breve a la pregunta.
La acción de una caña de pescar establece el punto crítico en la elasticidad de una caña, es decir que es una medida de su capacidad para doblarse sin ceder y partirse.
Las cañas necesitan doblarse para servir a su propósito de lance y captura, pero no todas se doblan igual ni soportan la misma intensidad de lucha con los especímenes.
Tu caña de pescar ideal no existe, puesto que los distintos tipos de capturas y los muchos sitios de pesca en condiciones muy diversas pueden dictar la necesidad de un tipo de caña u otro.
La acción de la caña de pescar se expresa en gramos; para cada tipo de caña, cuanto menos gramaje tenga una caña, más flexible será y mayor capacidad elástica te ofrecerá.
Por lo tanto, una caña con acción de poco gramaje te ofrece un límite más generoso, relativo a cuanto está dispuesta a doblarse para ayudarte en tus capturas.
En la información del fabricante suele encontrarse el dato del gramaje de acción asociado a otro concepto que trabaja en equipo con la acción: la potencia de la caña.
La acción de la caña de pescar se clasifica en 3 tipos en función del arco de la parábola que forma su cuerpo curvado:
- Acción parabólica
- Acción semi-parabólica
- Acción de punta
Estos 3 tipos describen una parábola decreciente de arriba a abajo, es decir que la acción parabólica (como su nombre indica) es la que mayor grado de elasticidad presenta en la mayor parte de su longitud. Por contra, la acción de punta ofrece toda su elasticidad en una pequeña parábola que se limita al segmento superior del cuerpo de la caña. Como el nombre indica, la acción semi-parabólica se queda en un término medio que la hace muy indicada para entusiastas recién llegados al mundo de la pesca.
¿Porqué la acción semi-parabólica es adecuada para aprender a pescar?
Esto no es casual, se debe a que el punto medio en la elasticidad de la caña ofrece un equilibrio «para todos los públicos» entre la rapidez, la sensibilidad y finalmente la capacidad de carga que tenga la caña (que tiene que ver con la potencia mencionada antes, de ahí que generalmente se indique acción/potencia).
Así una caña pensada para presas combativas, fuertes y/o pesadas necesite una potencia elevada, lo cual nos lleva a la siguiente pregunta:
¿Porqué vas a querer una caña que se pueda doblar mucho?
Las cañas de acción parabólica absorben parte de la fuerza ejercida al otro extremo del sedal.
Aquí sirve la misma física básica de absorción de impactos de los coches.
Un coche que quede «entero» después de un choque importante habrá traspasado la mayor parte de la fuerza de dicho impacto a sus ocupantes, lo cual puede ser fatal.
En cambio, cuanto más moderno es un coche (por adecuarse a normas de seguridad más exigentes), tanto más se deforma ante un impacto fuerte. Claro que es un dolor para el bolsillo, pero la deformación del coche consigue mitigar en gran medida la fuerza del choque, ahorrando a los ocupantes una fuerza G letal y traumatismos importantes.
Por suerte para el arte de la pesca, las cañas de pescar de acción parabólica están diseñadas para deformarse durante el forcejeo de la captura y recuperar su forma en estado de reposo.
Al doblarse en tanta extensión, la acción parabólica ofrece al pescador un amortiguador entre la fuerza que ejerce la captura a través del sedal y el chasis que sujeta la caña, que no es otro que el cuerpo y brazos del pescador.
Si la caña no se doblara, la fuerza pasaría íntegramente a ser soportada por el pescador, además de hacerla más vulnerable a la fractura si la presa es de consideración (y si el pescador no ha cedido o perdido la caña antes).
¿Hay cañas rápidas y lentas?
En buenas manos, hay algo que diferencia notablemente la acción de punta de la parabólica o semi-parabólica: la rapidez.
No se trata de correr, sinó de ser capaces de mover el señuelo a donde haga falta de forma ágil.
Recordemos que al hablar de acción parabólica hemos hablado de amortiguación, y este efecto funciona en ambos sentidos: del agua a las manos y de las manos al agua.
Imagina que quieres hacer un movimiento rápido con la caña para llevar el cebo del punto A al punto B: la fueza que ejerzas sobre la caña, en caso de ser muy flexible a lo largo de su longitud (acción parabólica), llegaría a la punta de la caña con un desfase de tiempo que haría el movimiento lento y probablemente torpe.
Si la acción es de punta, tu fuerza se va notar inmediatamente en el cuerpo semi-rígido de la caña y la amortiguación será mucho menor, al darse en un segmento corto del lado contrario de la caña. Eso hará que el movimiento sea «en tiempo real» y tengas mucho más control sobre él, facilitando que el sedal y el cebo hagan lo que tú quieras, y no lo que la caña te deje.
¿Para qué queremos cañas con acción de punta?
Unas líneas más arriba hemos dicho «movimiento lento». En efecto, hay cañas rápidas y lentas, además de innumerables grados intermedios.
Como ya habrás intuido con lo que ya se ha expuesto, la flexibilidad es de nuevo el factor dominante.
Si quieres velocidad, la acción de punta es la indicada. Si vas a por «premios gordos», probablemente perderás la caña si no es de acción parabólica (y según lo dicho, de potencia elevada). Por eso las cañas de acción parabólica se consideran lentas frente a la rapidez de las de acción de punta.
Planificación al poder
Ya ves que cada tipo de caña tiene una misión concreta, con lo que es de sentido común tener claro el objetivo antes de comprar tu caña de pescar.
Si te estás iniciando en la pesca sin invertir mucho, optarás por una solución intermedia que te sirva para todo.
Ya llegarás a dominar con el tiempo, entonces ya habrás desarrollado tus propios gustos (también hay variedad de fuerza, corpulencia, habilidad, lugar desde donde pescas, especies autóctonas, etc) y podrás comprar una caña especializada o varias cañas que te permitan ir a por todas.
Te dejamos un ejemplo práctico de la utilidad de varias cañas con difentes acciones en este artículo sobre cañas de pesca spinning en aguas interiores.