pesca calamar dtd

Pesca del Calamar. Una noche para recordar.

[fusion_builder_container hundred_percent=»no» equal_height_columns=»no» hide_on_mobile=»small-visibility,medium-visibility,large-visibility» background_position=»center center» background_repeat=»no-repeat» fade=»no» background_parallax=»none» parallax_speed=»0.3″ video_aspect_ratio=»16:9″ video_loop=»yes» video_mute=»yes» overlay_opacity=»0.5″ border_style=»solid»][fusion_builder_row][fusion_builder_column type=»1_1″ layout=»1_1″ background_position=»left top» background_color=»» border_size=»» border_color=»» border_style=»solid» border_position=»all» spacing=»yes» background_image=»» background_repeat=»no-repeat» padding=»» margin_top=»0px» margin_bottom=»0px» class=»» id=»» animation_type=»» animation_speed=»0.3″ animation_direction=»left» hide_on_mobile=»small-visibility,medium-visibility,large-visibility» center_content=»no» last=»no» min_height=»» hover_type=»none» link=»»][fusion_text]

pesca calamar dtd

Anoche fue una noche de pesca para recordar, una de esas jornadas que quedan grabadas en la memoria de todo pescador. Decidi salir a pescar tarde, hacia las 23:30 o así. El objetivo era tocar algo de tinta, pescar algún calamar pues ya llevaba tiempo sin salir de pesca. Cuando llegué mi compañero y amigo del alma Fernando ya se encontraba en el pesquero tentándolos con la técnica de pesca eging. Pero el tiempo frío, húmedo y desapacible no acompañaba. Al final escogimos una zona que se encontraba bastante resguardada del viento, comenzamos a pescar y nada. Tras un buen rato rastreando a diestro y siniestro, cambiando señuelos a porrillo sin conseguir capturas, como siempre me tiran mas mis peces DTD en uno de los cambios me puse un modelo que ya me a dado bastantes alegrias. Y llegó el momento esperado. Noto una picada, le tiro y como si nada.  Dejo quieta la caña y empiezo a notar tension, más tensión  y le zumbo…. Aquello fue descomunal. Pegó tal arreón el calamar para, a continuación sin encomendarse ni a Dios ni al diablo, bajar hasta el fondo a velocidad de vértigo como si de un mísil se tratara. El calamar capturado dió mucha guerra y la caña me la puso bien al temple. Cómo no, gracias a mi compañero de pesca Fernando porque sin su ayuda como ganchero lo hubiera tenido muy complicado para ponerlo en seco. Muchas gracias, compañero, por salabrarlo y por inmortalizarme en esta preciosa imagen de mi récord personal en pesca eging. La bestia pesó 1,677 kg., un señor calamar.

*Desde Formulapesca agradecemos a José Madrid Squid la publicación del artículo y la cesión de la imagen.

[/fusion_text][/fusion_builder_column][/fusion_builder_row][/fusion_builder_container]

Artículos Relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *